La ex directora de Chelsea, Marina Granovskaia, dice que un agente la amenazó.
Un ex director del Chelsea FC se sintió “amenazado físicamente” por un agente de fútbol que le advirtió que enviaría matones a menos que recibiera una parte de la tarifa de transferencia de £29.8 millones de Kurt Zouma, según se dijo en un tribunal.
Marina Granovskaia fue informada por Saif Alrubie, de 45 años, que se le debían £300,000 por ayudar a facilitar el traslado del defensor francés al West Ham en agosto de 2021.
Los fiscales dijeron que Alrubie le envió un correo electrónico un año después de que se completara el acuerdo, diciéndole: “Ya no seré amable contigo… Si el Chelsea no lo paga, serás tú quien lo pague”.
Insinuó que Granovskaia se encontraría en “la misma situación” que Kia Joorabchian, un agente de fútbol de origen iraní que fue confrontado en un restaurante y supuestamente le robaron su reloj, a menos que se hiciera el pago. Se dijo en el tribunal de Southwark que Joorabchian fue posteriormente abordado por 12 cobradores de deudas que “comenzaron a intimidarlo y dijeron que [Alrubie] quería su dinero”.
El acusado le dijo a Granovskaia: “En la vida no puedes estar equivocado y ser fuerte. Estoy seguro de que has oído la historia sobre tu otro amigo Kia cuando me debía dinero durante un año y cómo terminó pagándolo. No quisiera que te encuentres en la misma situación solo porque tienes un problema personal conmigo”.
Se acusa a Alrubie de enviar a Granovskaia una comunicación electrónica con la intención de causar angustia o ansiedad, lo cual niega.
Arizuna Asante, en representación de la acusación, preguntó a Granovskaia el martes cómo se sintió cuando recibió el correo electrónico el 22 de mayo de 2022.
Granovskaia, quien dejó el Chelsea en agosto de 2022 después de que el club fuera vendido, dijo: “Decir que me sentí incómoda sería quedarse corto. Me sentí amenazada, físicamente amenazada debido al lenguaje que se utilizó y porque se refirió al incidente de Kia”.
Asante dijo: “¿Estabas al tanto de algo que le sucedió a Kia?”
Granovskaia respondió: “Recordaba haber oído algo al respecto”.
Él preguntó: “¿Como resultado de lo que crees que sucedió o escuchaste, eso te hizo sentir amenazada?” Ella dijo: “Así es”.
En la apertura del caso de la acusación, se les dijo a los miembros del jurado que el club había recibido ofertas por Zouma en agosto de 2021. Alrubie pensó que podría presionar al West Ham para que pagara £21 millones más £4 millones adicionales en complementos, se dijo en el tribunal.
Asante dijo: “La Sra. Granovskaia tenía experiencia con personas que intentan involucrarse en acuerdos y la acusación alega que Saif Alrubie era una de esas personas. [Él envió] una oferta por el Sr. Zouma, pero el acuerdo no fue suficiente para que el club considerara venderlo”.
El 25 de agosto de 2021, antes de que se llegara a un acuerdo, Granovskaia fue “muy clara por escrito” en que Alrubie no trabajaba para el Chelsea. En mensajes de WhatsApp, dijo que si Zouma se vendía por más de €30 millones, él recibiría una comisión.
Asante agregó: “La acusación sostiene que no había nada vinculante en esos intercambios simplemente porque esto era precontrato. Cuando se realizó la venta del Sr. Zouma, como es habitual, se creó un documento llamado hoja de acuerdo, este documento identificaba claramente a todos los intermediarios en un acuerdo y en esta hoja de acuerdo, el Sr. Alrubie no estaba identificado en ella.
“Cuando la Sra. Granovskaia rechazó su demanda, las comunicaciones entre ambos tomaron un giro indeseado. El caso de la Corona es que [Alrubie] envió un correo electrónico que transmitía una amenaza con la intención de causar angustia o ansiedad a la Sra. Granovskaia. La referencia del acusado a Mr. Kia Joorabchian connota la amenaza de intimidación física.
“No hubo absolutamente ninguna amenaza de acción legal en su caso y la afirmación del acusado en su declaración de defensa no es ni creíble ni una creencia genuina por parte de él”.
Alrubie, de Fulham, oeste de Londres, niega un cargo único bajo la Ley de Comunicaciones Maliciosas de 1988.
El juicio continúa.
